El oro como alternativa de inversión para la clase media argentina
En un contexto económico global marcado por la incertidumbre, la inflación y las fluctuaciones de los mercados, muchas personas buscan refugios de valor para proteger su capital. En este escenario, el oro se ha consolidado históricamente como una de las opciones más seguras y confiables.
Por Alba Paz
Históricamente los argentinos son partidarios del ahorro, en dólares, en euros, en plazo fijo, en bonos, bitcoin, en inversiones de bajo riesgo en la bolsa. Tener la seguridad de un «colchón» es una de las necesidades que hacen que los las personas trabajen enfocadas en un objetivo.
La actual tendencia que aumenta exponencialmente es el ahorro en oro, debido a su estabilidad y almacenaje. En esta nota, lo que hay que saber sobre esta nueva metodología de ahorro.
En Argentina, con su particular dinámica económica y financiera, surge la pregunta: ¿Cómo puede el inversor local acceder al oro de manera efectiva? ¿Cuáles son las opciones disponibles en el país y qué factores influyen en su compra? Para entender mejor las posibilidades de adquirir oro en Argentina y las implicancias económicas de esta inversión, desde ACERO Y ROCA consultamos a un economista experto en la materia, Juan Manuel Frencia, Jefe de Investigación y Estrategia de SJB Finanzas Expertas, quien nos brindó su visión sobre el panorama actual y las alternativas más accesibles para los argentinos interesados en este preciado metal.
El oro como la inversión más atractiva en la actualidad
Frencia explica que aunque existen otros activos que pueden funcionar como refugios de valor, como el dólar estadounidense o el yen japonés, ninguno ha demostrado ser tan confiable como el oro. «Esto se debe principalmente a la baja volatilidad de su precio. Además, el dólar, considerada una de las monedas más fuertes a nivel mundial, ha experimentado en los últimos años períodos de alta inflación, con tasas que incluso alcanzaron el 8 % anual. Como resultado, los capitales que se refugiaron en el dólar han perdido valor debido a la inflación. En cambio, el oro ha mantenido su estabilidad».
«Por otro lado, el resurgimiento del bitcoin ha abierto el debate sobre si realmente puede considerarse un refugio de valor. En mi opinión, aún no lo es. El bitcoin sigue siendo un activo altamente volátil, con fluctuaciones significativas en su precio. Esto impide que cumpla con los requisitos que uno espera de un activo que proteja su valor a lo largo del tiempo. En este momento, el bitcoin se comporta más como un activo especulativo para generar rentabilidad, pero no como un refugio de valor confiable», explicó el economista.
El oro como refugio de valor ante crisis económicas geopolíticas
Este metal precioso, que no depende de la solvencia de un gobierno o institución, se ha convertido en un activo vital en momentos de crisis, explicó el economista: «En los últimos meses, se ha observado un aumento significativo en el precio del oro, que actualmente se encuentra cerca de sus máximos históricos. Este repunte se puede atribuir, en parte, a la situación del dólar estadounidense. Las expectativas sobre la economía de Estados Unidos, especialmente en lo que respecta a la inflación, no son favorables. Se prevé que en los próximos años Estados Unidos experimentará un crecimiento de la inflación, sumado a un nivel de déficit fiscal muy alto. Estas señales son vistas por los inversores, quienes, en lugar de optar por el dólar, prefieren refugiarse en el oro como una opción más segura para proteger su capital».
Los principales factores que determinan el precio del oro
«El oro es principalmente un commodity contracíclico, lo que significa que su demanda aumenta especialmente en tiempos de crisis globales, recesiones económicas o períodos de alta inflación. En épocas de recesión, su demanda aumenta, y lo contrario ocurre en fases de crecimiento económico. Otro determinante importante es el valor del dólar. La moneda estadounidense es su principal competidor. En períodos en los que el dólar se fortalece y se aprecia frente a otras monedas, los inversores tienden a preferir el dólar sobre el oro. En cambio, cuando el dólar pierde fuerza o se deprecia, los inversores comienzan a demandar más oro en lugar de dólares como refugio de valor», aclara el experto.
Riesgo y retorno: Oro vs activos tradicionales
El análisis de riesgo y retorno es esencial cuando se comparan activos como el oro y los activos tradicionales, tales como las acciones, bonos y otros instrumentos financieros. Cada tipo de activo tiene características específicas que lo hacen atractivo en diferentes contextos de inversión: «En términos de riesgo y retorno, el oro sin duda debe ser catalogado como un activo de baja volatilidad, conservador y seguro. Cuando un inversor decide invertir en oro, no está buscando grandes rentabilidades, sino más bien un bajo nivel de riesgo, una baja volatilidad y la capacidad de conservar el valor de su capital a lo largo del tiempo», expresa Frencia.
Compra de oro
Se puede invertir en oro de diversas maneras:
Oro físico: lingotes de oro que actualmente son publicitadas por grandes cadenas de joyerías de 10, 20 o 50 gramos desde un millón de pesos argentinos y se pueden pagar hasta en doce cuotas fijas; monedas de oro que varían en precios desde un millón a cinco millones de pesos argentinos. Aunque estas joyerías no tienen casa central en San Juan, realizan tours a la vecina provincia de Mendoza. Como ventaja, las personas pueden tener el oro en posesión física y es un activo tangible, pero como desventaja requiere un lugar seguro para su almacenamiento, como una caja de seguridad en un banco.
Comprar joyas de oro: También es una forma de adquirir este metal precioso, aunque no es la opción más recomendada desde el punto de vista de la inversión. El valor de reventa generalmente será inferior al valor del oro puro debido al costo de fabricación y el diseño. Además, la pureza del oro en las joyas puede ser inferior al oro de inversión, generalmente 24 quilates.
Oro en Forma de Instrumentos Financieros: «Hoy en día, gracias a la tecnología y la globalización, es muy fácil comprar e invertir en oro. Se puede hacer desde una cuenta de inversión local; sólo es necesario crear una cuenta comitente en una entidad financiera local e invertir una suma de dinero en esa cuenta para poder adquirir el oro. Actualmente, se puede comprar el ETF de oro GLD (Fondos Cotizados en Bolsa), que es un fondo de inversión cuyo valor replica el precio del oro y está respaldado por oro físico almacenado en bóvedas de alta seguridad. Este respaldo garantiza que el activo esté respaldado por oro real. Por lo tanto, se trata de un activo bastante seguro que cumple con todas las normativas locales e internacionales, lo que brinda una mayor seguridad a la inversión y asegura que refleje el valor del oro a lo largo del tiempo. En esencia, es como tener oro en el bolsillo», explica el economista experto.
Las acciones de las mineras de oro están en alza, impulsadas por los precios del metal en máximos históricos. Sin embargo, las mejores opciones para los inversores serán aquellas compañías con bajo nivel de endeudamiento, modelos operativos eficientes, un sólido flujo de caja y disciplina en la gestión de costos. Según información de StockAnalysis.com, existen diversas empresas en las que se puede invertir para obtener exposición al mercado del oro: Royal Gold, Inc. (RGLD), Barrick Gold (GOLD), Agnico Eagle Mines Limited (AEM), Newmont Corporation (NEM), Kinross Gold Corporation (KGC).
Mercados paralelos
«En prácticamente todos los mercados, se genera un mercado informal debido a las transacciones fuera de la normativa y los regímenes impositivos establecidos. Sin embargo, es importante recordar que lo más seguro siempre será trabajar e invertir en activos o empresas reguladas y controladas bajo normativas tanto nacionales como internacionales. Esto ayuda a evitar caer en estafas o involucrarse en esquemas de lavado de activos, entre otros riesgos. Por lo tanto, lo más recomendable es operar con organismos y entidades reguladas, ya que esto garantiza una mayor seguridad al momento de realizar inversiones y reduce el riesgo de ser víctima de fraudes», concluyó Juan Manuel Frencia.