Vale apunta a ser la minera más valiosa del mundo: estrategia y desafíos
La minera brasileña Vale SA, una de las mayores productoras mundiales de mineral de hierro, ha puesto como objetivo estratégico posicionarse como la empresa minera más valiosa del mundo. Esta ambición, planteada públicamente por su CEO Gustavo Pimenta desde que asumió el cargo en octubre de 2024, implica una serie de transformaciones operativas, tecnológicas y financieras que buscan revertir las dificultades que enfrentó la compañía en años recientes y aprovechar su vasto potencial geológico.
William Cortez

VALE quiere subirse al podium y convertirse en la minera numero uno a nivel mundial
Actualmente, VALE cuenta con una capitalización bursátil cercana a los 43.900 millones de dólares, ubicándose detrás de gigantes como BHP Group y Rio Tinto. Sin embargo, la compañía opera sobre lo que Pimenta denomina “el mayor endowment minero del mundo”, una vasta dotación de recursos minerales que sustenta su ambición de liderazgo global.
Su principal activo es el complejo minero de Carajás, en el estado de Pará, la mina de mineral de hierro más grande del planeta, que será el eje central de sus planes para el próximo lustro.
Reactivación y ampliación productiva: el pilar de la estrategia
El núcleo del plan de Vale para aumentar su valor de mercado está basado en incrementar la producción anual de mineral de hierro a 360 millones de toneladas para 2030. Para conseguirlo, la empresa planea reactivar la mina de Capanema, que aportará una producción adicional estimada en 15 millones de toneladas anuales.
Asimismo, se potenciarán las operaciones en Carajás con inversiones destinadas a optimizar la eficiencia de extracción y procesamiento, así como la digitalización de procesos operativos para maximizar la productividad.
Gustavo Pimenta CEO de la compañía asumió al final del 2024, implementando una serie de transformaciones operativas, tecnológicas y financieras para llevar a los mas alto la compañía
Este enfoque responde a la creciente demanda global de mineral de hierro, especialmente para la fabricación de acero en economías asiáticas, sino que también busca mejorar los márgenes operativos mediante la reducción de costos y la automatización.
En un contexto donde la volatilidad de los precios del mineral es una constante, aumentar la eficiencia productiva es clave para mantener la rentabilidad.
Seguridad operacional y sostenibilidad ambiental: un compromiso ineludible
Vale carga con el peso de dos grandes tragedias mineras recientes: el colapso de la represa de Mariana en 2015 y el desastre de Brumadinho en 2019, que dejaron cientos de víctimas y dañaron su reputación internacional.
En respuesta, la compañía ha transformado su enfoque en materia de seguridad operacional, priorizando la eliminación progresiva del uso de represas convencionales para almacenar relaves.
Un elemento destacado de su estrategia es que para 2030 alrededor del 10% de la producción de mineral de hierro provendrá del reprocesamiento de relaves, una técnica que reduce la dependencia de nuevas explotaciones y disminuye el impacto ambiental.
El desastre de Mariana ha sido la mayor tragedia medioambiental de la historia de Brasil
Además, Vale ha implementado sistemas avanzados de monitoreo y control para evitar accidentes y fortalecer la gestión de riesgos en sus operaciones, consolidando un nuevo paradigma de minería responsable.
Esta apuesta es además una respuesta a las crecientes demandas regulatorias y sociales que exigen a la industria minera operar bajo estrictos estándares de sostenibilidad y transparencia. En un escenario donde la minería verde gana protagonismo, Vale busca posicionarse como referente en prácticas ambientalmente responsables.
Diversificación y expansión en metales base
Aunque el mineral de hierro es la columna vertebral de Vale, la empresa reconoce la necesidad de diversificar su portafolio para capitalizar la creciente demanda de metales críticos para la transición energética, como el cobre. Para ello, su división Vale Base Metals tiene el objetivo ambicioso de duplicar la producción de cobre, pasando de 350.000 a 700.000 toneladas anuales.
Este crecimiento será impulsado por proyectos clave en Brasil y en el extranjero, y también por la posibilidad de sacar a bolsa esta unidad para atraer capitales frescos que financien su expansión. El cobre, esencial para la electrificación y la industria tecnológica, se convierte así en un vector estratégico que permitirá a Vale enfrentar los desafíos del mercado y reducir su dependencia del mineral de hierro.
El CEO de VALE ha encontrado una vía de «diálogo cercana» con el presidente de Brasil da Silva y sus ministros revirtiéndo las crisis del pasado entre el gobierno y la minera
Relación con el gobierno y apuesta por la región amazónica
La gestión de Gustavo Pimenta ha logrado renovar el vínculo con el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, mejorando el clima de diálogo institucional que es clave para el desarrollo de grandes proyectos mineros. En este marco, Vale anunció una inversión histórica de 70 mil millones de reales (aproximadamente 12.200 millones de dólares) en su complejo de Carajás, consolidando la apuesta por el desarrollo sostenible de la región amazónica.
Este compromiso no sólo tiene impacto económico, sino que también implica responsabilidades sociales y ambientales que la empresa se ha comprometido a cumplir. La inversión incluye proyectos para la protección de la biodiversidad, apoyo a comunidades indígenas y fortalecimiento de infraestructuras locales.
Desafíos y perspectivas
El camino para que Vale alcance el objetivo de ser la minera más valiosa del mundo no está exento de desafíos. La volatilidad de los precios de los commodities, la presión regulatoria y la necesidad constante de innovación tecnológica demandan una gestión rigurosa y adaptable.
Además, la empresa debe continuar restaurando la confianza de los inversores y de las comunidades afectadas por sus operaciones.
El desafío de VALE es recuperar la confianza y la licencia social, algo quedó muy deteriorado tras las catástrofes sufridas en Brasil. La estrategia y el mercado están acompañando los pasos
No obstante, la combinación de un vasto portafolio mineral, el compromiso con la seguridad y la sostenibilidad, y la diversificación hacia metales estratégicos posiciona a Vale en un lugar privilegiado para afrontar los retos del futuro.
Su estrategia será observada de cerca por el sector minero global, ya que su éxito o fracaso tendrá implicancias para la industria y las economías de la región amazónica.