De la mina al mercado global: Logística, el nuevo «mineral crítico» de la era
 La industria minera está viviendo una transformación profunda. Ya no se trata solo de extraer y exportar; ahora, la clave está en cómo esos minerales críticos son transportados, refinados y llevados al mundo. Según un informe, la fragmentación de las cadenas de suministro, la volatilidad geopolítica y las exigencias ambientales están obligando a repensar toda la logística del sector.
Minerales como las tierras raras, el litio o el cobre se han convertido en ejes de poder económico global.
Por Sergio Álvarez
De la mina al mercado: Los retos y transformaciones de la la logística minera
En este escenario global, la logística minera se enfrenta a retos inéditos: rutas más largas, costos crecientes, tiempos más impredecibles.
Por consiguiente, para adaptarse, las empresas están diversificando modos de transporte, fuentes de abastecimiento y acercando procesamiento a los puntos de extracción. La regionalización ya no es una opción, sino una necesidad.
La integración vertical
Además, la integración vertical, es decir, que las mismas compañías extraigan, procesen y exporten, gana terreno como estrategia para reducir dependencia de intermediarios y transporte.
Estados Unidos: Estrategia de diversificación para reducir la dependencia de China
Mientras tanto, en el ámbito geopolítico, Estados Unidos ha dado un paso clave para diversificar su acceso a las tierras raras, al firmar un acuerdo con Malasia que le garantiza la libre importación de minerales críticos sin cuotas ni prohibiciones.
Acuerdo con Malasia: Libre importación de minerales críticos
El pacto, firmado durante la cumbre de la ASEAN en Kuala Lumpur, también contempla licencias para que empresas estadounidenses participen directamente en el desarrollo del sector minero malasio.

China y Estados Unidos, actores clave en la competencia global por el control de las cadenas de suministro de minerales críticos.
Una red de alianzas: Australia, Tailandia y Camboya fortalecen el suministro
En concreto, según el documento oficial, el acuerdo busca que la inversión bilateral en minerales críticos sea “lo más libre y resistente posible”, en línea con la estrategia de Washington de reducir su dependencia del suministro chino.
Además, la medida se suma al acuerdo previo con Australia, país que posee una de las mayores reservas mundiales de tierras raras, y a nuevos convenios de cooperación con Tailandia y Camboya para fortalecer la expansión de las cadenas de suministro regionales. Esta red de alianzas consolida una nueva arquitectura logística impulsada por EE.UU., con el objetivo de garantizar el flujo de minerales esenciales para sectores como defensa, energía y tecnología.
Europa y China: Una pulseada geopolítica por los flujos de exportación de críticos
En paralelo, la Unión Europea y China mantienen un diálogo diplomático para resolver el conflicto generado por los controles chinos a la exportación de tierras raras, vigentes desde abril.
Restricciones chinas: Un «problema global» para la industria europea
Desde su perspectiva, Bruselas considera que las restricciones “causan un problema global” y afectan la continuidad de la producción industrial europea.
El comisario de Comercio europeo, Maroš Šefčovič, inició una ronda de reuniones con su par chino para intentar destrabar unas 2.000 solicitudes de exportación pendientes, que han generado retrasos en la cadena de valor de sectores estratégicos como los chips, las energías renovables y la electromovilidad.
A pesar de esto, si bien ambas partes expresaron su voluntad de “evitar una escalada”, el bloqueo comercial deja en evidencia la vulnerabilidad logística del bloque europeo ante la concentración del mercado en Asia y la influencia indirecta de Estados Unidos en el conflicto.
Digitalización, trazabilidad e integración vertical: La tecnología al servicio de la resiliencia logística

La digitalización, inteligencia artificial y analítica predictiva son pilares para la resiliencia y optimización de la logística minera.
En este contexto, la tecnología se consolida como el principal factor de resiliencia.
Específicamente, la inteligencia artificial y la analítica predictiva lideran la inversión del sector, con aplicaciones orientadas a anticipar fallas, optimizar la rotación de inventarios y reducir imprevistos logísticos.
Tecnología: IA y analítica predictiva para optimizar la cadena
Sin embargo, la digitalización todavía se implementa de manera fragmentada. El desafío pasa por construir una infraestructura digital unificada que conecte todos los eslabones de la cadena, desde la extracción hasta la exportación, para garantizar trazabilidad y agilidad operativa.
Infraestructura digital unificada: El desafío pendiente
Al mismo tiempo, la integración vertical gana terreno: cada vez más compañías buscan procesar y refinar localmente los minerales, disminuir la dependencia de intermediarios y reducir la huella de transporte. Este enfoque favorece la aparición de cadenas de valor más cortas y sostenibles, impulsadas por la cooperación regional y la inversión en infraestructura compartida.
América Latina: Oportunidad única para una integración estratégica en la cadena global

La logística minera se adapta a nuevos desafíos, priorizando rutas más cortas y eficientes para minerales críticos.
Frente a este panorama global, para América Latina, región rica en litio, cobre y tierras raras, aparece una ventana de oportunidad. No solamente como proveedoras de materias primas, sino como actores integrados en la cadena global logística. Precisamente, ahí radica el desafío: no quedar relegadas solo a la extracción, sino participar también en el procesamiento, la logística y el refinado.
En síntesis, la minería global entra en una nueva era: ya no bastan los yacimientos, ahora importa la ruta, la red, la tecnología y la alianza. Para países como Argentina y particularmente para regiones como San Juan, que aspiran a jugar un rol clave en la minería del futuro, esto exige explotar minerales y al mismo tiempo construir cadenas logísticas propias, eficientes y estratégicas. Porque en este tablero mundial, la logística ya es uno de los “minerales críticos” del siglo XXI.
