Observatorio PyME Minero: «Los proveedores locales están en modo supervivencia pese al boom exportador»
Por Yenhy Navas
La minería en Argentina atraviesa un momento histórico de redefinición. Mientras las cifras macroeconómicas proyectan récords de exportación, el eslabón más sensible de la cadena, los proveedores locales, enfrenta desafíos críticos. En una entrevista exclusiva para ACERO Y ROCA, Roberto Fritzsche, economista y director del Observatorio PyME Minero (OPM), analiza la salud real del sector.
La operación a cielo abierto muestra la bonanza exportadora que contrasta con la PyMEs en crisis. Imagen creada por ACERO Y ROCA
Desde su nueva base en el Centro de Estudios Económicos de la Gestión en Energía y Minería de la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde opera el primer Observatorio PyME Minero de Argentina, su director Roberto Fritzsche advierte sobre una realidad dual: bonanza en los titulares, pero tensión en el territorio. En este sentido, el diagnóstico del OPM es contundente: para comprender el impacto real de la actividad, es urgente dejar de hablar de «minería» a secas y comenzar a hablar de «Industria Minera».
De la extracción a la «Industria Minera»: un cambio de paradigma
Uno de los pilares del análisis de Fritzsche radica en la distinción entre la actividad extractiva pura y el ecosistema industrial que la rodea. Existe un sesgo histórico negativo asociado a la palabra «minería», vinculada casi exclusivamente al acto de extraer. Sin embargo, al analizar la cadena de valor completa, la perspectiva cambia radicalmente.
«Cuando uno habla de industria minera, plantea una condición diferente a la minería, que es el agregado de valor».
Quiénes integran el ecosistema minero
Esta visión integradora busca visibilizar a actores que usualmente quedan fuera del radar mediático, pero que son el motor de los yacimientos. Según detalla el especialista, la actividad termina conformando una comunidad compleja:
- No solo son empresas operadoras.
- Incluye servicios de inversión, logística y energía.
- Requiere estudios contables, académicos y gestión social.
«Uno necesita del economista, del contador, de aspectos sociales y hasta psicológicos», subraya Fritzsche.
Diagnóstico 2025: Bonanza macro vs. la realidad de las PyMEs
Al poner la lupa sobre los datos duros, el Observatorio PyME Minero detecta una clara dualidad en el escenario actual. Por un lado, la minería argentina vive una «bonanza exportadora», con proyecciones que superan los 5.000 millones de dólares anuales, impulsada por los precios del oro, la plata y la demanda estratégica de litio y cobre.
En contraste, esta realidad macro choca con la situación «micro» de los proveedores. Según los relevamientos del OPM, muchas PyMEs se encuentran hoy en una fase de «tensión crítica» o «modo supervivencia».
Roberto Fritzsche, economista y director del Observatorio PyME Minero (OPM) en la UBA.
El impacto de la recesión manufacturera en las PyMEs
A pesar de que históricamente alrededor del 50,8% de las compras totales de la minería fueron realizadas a proveedores nacionales, la coyuntura actual presenta fragilidades estructurales. La industria PyME manufacturera aún no logra salir de la recesión, mostrando caídas interanuales en el empleo y una presión de costos que afecta la rentabilidad.
Como resultado, en el nicho específico de los proveedores, esto se agrava por la finalización de obras en ciertos proyectos y la fluctuación de precios. Si bien existe una ventana de oportunidad, el «derrame» hacia la cadena de valor local no es automático.
Las trabas a importaciones: Un freno de mano para las PyMEs
Una de las variables que más ha golpeado la operatividad de las PyMEs mineras en el último año ha sido la restricción en el acceso a insumos importados. El sistema de importaciones (SIRA/SIRASE) generó demoras que, según el análisis del Observatorio, pusieron en jaque la continuidad productiva.
El impacto es directo y nocivo: la falta de repuestos, insumos químicos o maquinaria específica no solo retrasa las ampliaciones de yacimientos, sino que además deja a los proveedores locales sin herramientas para cumplir con sus contratos. Para una PyME radicada en una provincia minera, estas trabas constituyen un factor de fragilidad que limita su capacidad de inversión y actualización tecnológica.
El taller de servicios, eslabón clave de la cadena, es donde se siente la recesión. Imagen creada por ACERO Y ROCA
El RIGI y el riesgo para la industria nacional
Frente al nuevo ciclo de inversiones impulsado por regímenes como el RIGI (Régimen de Grandes Inversiones), Fritzsche plantea una visión cautelosa. Si bien la llegada de capitales para proyectos de cobre y litio representa una oportunidad histórica, existe el riesgo concreto de que las empresas locales queden relegadas.
El director del OPM advierte que la escala y capacidad financiera que exigen los grandes proyectos internacionales pueden superar la capacidad operativa de las PyMEs argentinas actuales. Por consiguiente, sin programas de fortalecimiento técnico, certificación y acceso a financiamiento, el desajuste podría derivar en la subcontratación de grandes firmas extranjeras.
La postura del Observatorio es clara: el «compre local» debe articularse de manera inteligente, asegurando que la lluvia de inversiones se traduzca en desarrollo industrial genuino.
El factor humano a 4.000 metros de altura
Más allá de las toneladas de mineral y los balances comerciales, Fritzsche introduce un elemento vital: el costo humano y psicológico del trabajador minero. La minería se desarrolla en condiciones geográficas extremas, lejos de los centros urbanos y de los afectos.
«Tener muy buenos profesionales, pero trabajar a 5.000 metros de altura, no es lo mismo que estar trabajando en tu casa», reflexiona Fritzsche.
El régimen de trabajo (rosters) genera una presión psicológica distinta a la de cualquier otra industria. «Jamás van a sustituir el concepto del amor… es el tema de sentimientos», afirma el entrevistado. Esto representa un desafío adicional para las PyMEs: a diferencia de las grandes operadoras que cuentan con mayores recursos para bienestar, las empresas más chicas enfrentan dificultades para retener talentos técnicos, generando una fuga de capital humano hacia las multinacionales.
El trabajo en campamentos mineros: el costo humano y psicológico del desarraigo que enfrentan las PyMEs al retener talento. Imagen creada por ACERO Y ROCA
Mitos ambientales: el caso del cuero vs. la minería
Desde el Centro de Estudios de la UBA, el Observatorio también aborda la cuestión ambiental para desmitificar prejuicios. Fritzsche utiliza una analogía potente con la industria del cuero.
«La industria del cuero utiliza mucha agua y también se hace mucho hincapié en lo tóxico, porque para procesar el cuero se utilizan muchos químicos», explica. No obstante, señala que hoy las curtiembres modernas tienen procesos controlados, muy distintos a los de hace 30 años. De la misma manera, la industria minera ha evolucionado tecnológicamente, gestionando riesgos con estándares superiores a los del pasado.
Proyecciones 2026: El nuevo rol del OPM en la UBA
Actualmente, el Observatorio PyME Minero ha fortalecido su posición bajo el paraguas académico de la Universidad de Buenos Aires. «Nos trasladamos recientemente a la UBA, soy profesor allí y director de las diplomaturas», confirma Fritzsche.
De cara al futuro, el organismo impulsa diplomaturas en Industria Minera Sustentable y en Logística Minera. Para 2026, preparan nuevas herramientas, incluyendo:
- Jornadas informativas sobre gestión de Recursos Humanos.
- Informes de trazabilidad para medir el componente local real de la minería.
El objetivo final es claro: generar datos confiables que permitan a las PyMEs dejar de ser actores de reparto y convertirse en protagonistas de una Industria Minera nacional sostenible.